4 maneras en las que la meditación cambia tu corteza prefrontal (y cómo te beneficia)

Sean Robinson 11-10-2023
Sean Robinson

La corteza prefrontal de tu cerebro es extremadamente poderosa.

Situado justo detrás de la frente, le ayuda a racionalizar (tomar decisiones), prestar atención (concentrarse), regular las emociones y, lo que es más importante... pensar conscientemente (autoconciencia) Es, en esencia, el "yo". panel de control ¡" de tu cerebro!

¿Cómo afecta la meditación al córtex prefrontal? Los estudios demuestran que la meditación regular engrosa el córtex prefrontal, evita que se debilite con la edad y también mejora su conexión con otras áreas del cerebro como la amígdala, ayudándole a regular mejor las emociones.

Veamos con más detalle estos sorprendentes cambios, pero antes, he aquí dos razones por las que el córtex prefrontal es tan importante.

1. ¡El córtex prefrontal nos hace humanos!

El tamaño relativo del córtex prefrontal es también lo que nos separa de los animales.

Los estudios han descubierto que, en los seres humanos, el córtex prefrontal ocupa casi el 40% de todo el cerebro. En los simios y chimpancés, es de entre el 15% y el 17%. En los perros, el 7% y en los gatos, el 3,5%.

Si nos guiamos por estos valores, no sería erróneo concluir que la razón por la que los animales viven en modo automático y tienen poca o ninguna capacidad de racionalizar o pensar conscientemente se debe a que la corteza prefrontal es relativamente más pequeña.

Del mismo modo, otro hecho interesante es que el tamaño relativo del córtex prefrontal es lo que nos separa de nuestros antepasados primitivos. Los científicos han descubierto que, a lo largo de la evolución, el córtex prefrontal es lo que más crece en los humanos, más que en cualquier otra especie.

Quizá sea ésta una de las razones por las que los hindúes adornan esta zona con un punto rojo (en la frente), también conocido como bindi.

Lea también: 27 regalos de meditación únicos para meditadores principiantes y avanzados.

2. El córtex prefrontal es el panel de control de tu cerebro

Como ya hemos dicho, el córtex prefrontal es literalmente el "panel de control" del cerebro.

Ver también: 26 símbolos solares antiguos de todo el mundo

Pero, por extraño que parezca, ¡no muchos de nosotros controlamos este panel de control! Hay muchas cosas que puedes conseguir cuando tomas el control de este panel de control.

He aquí una analogía: si tu cerebro/cuerpo fuera un caballo, entonces el córtex prefrontal es la correa, al sujetarla empiezas a retomar el control sobre tu cerebro (y cuerpo).

Increíble, ¿verdad?

Entonces, ¿cómo tomar el control del córtex prefrontal? Pues el secreto está en la meditación y otras prácticas contemplativas como la atención plena. Veamos por qué.

Meditación y corteza prefrontal

He aquí 4 formas en las que la meditación influye positivamente en su corteza prefrontal.

1. La meditación activa y refuerza el córtex prefrontal

La Dra. Sara Lazar, neurocientífica de Harvard, y sus colegas estudiaron los cerebros de los meditadores y descubrieron que sus córtex prefrontales eran relativamente más gruesos que los de las personas que no meditaban.

Ver también: 11 Beneficios espirituales del perdón (+ Una meditación para cultivar el perdón)

También encontró una correlación directa entre el grosor del córtex prefrontal y la cantidad de práctica meditativa. En otras palabras, cuanto más experimentado es el mediador, más grueso es su córtex prefrontal.

También se ha descubierto que la meditación, en particular, aumenta la densidad de materia gris en zonas del córtex prefrontal responsables de la planificación, la toma de decisiones, la resolución de problemas y la regulación emocional.

Así que una cosa está clara: la meditación activa el córtex prefrontal y, a largo plazo, lo refuerza, aumenta la potencia cerebral y te hace más consciente y dueño de tu cerebro.

2. La meditación refuerza la conexión entre el córtex prefrontal y la amígdala

Se ha estudiado que el córtex prefrontal está conectado con la amígdala (tu centro del estrés). La amígdala es una zona del cerebro que controla las emociones. Debido a esta conexión, el córtex prefrontal tiene la capacidad de moderar las respuestas emocionales.

Sin el córtex prefrontal, no tendremos ningún control sobre nuestras emociones y actuaremos impulsivamente cada vez que una emoción se apodere de nosotros, de forma muy similar a como actúan los animales.

Los estudios indican que, en realidad, la meditación refuerza las conexiones entre el córtex prefrontal y la amígdala, lo que permite controlar mejor las emociones. Los estudios también indican que el tamaño real de la amígdala se redujo y sus conexiones con otras partes primarias del cerebro disminuyeron en los meditadores experimentados.

Esto no sólo le da la capacidad de recuperarse más rápido de los ataques emocionales, sino que también se vuelve más receptivo en lugar de ser impulsivo y reactivo a las emociones.

Esto, a su vez, da lugar a cualidades positivas como la paciencia, la calma y la resiliencia.

3. La meditación evita que el córtex prefrontal se contraiga

Está demostrado que el córtex prefrontal empieza a reducirse con la edad, por lo que nos cuesta más entender y recordar las cosas.

Pero una investigación de la Dra. Sara Lazar, neurocientífica de Harvard, también ha descubierto que los cerebros de mediadores experimentados de 50 años tenían la misma materia gris en el córtex prefrontal que los de 25 años.

4. La meditación aumenta la actividad de la corteza prefrontal izquierda, que está relacionada con la felicidad.

El Dr. Richard Davidson, profesor de psicología y psiquiatría en la Universidad de Wisconsin-Madison, descubrió que cuando una persona está feliz, su corteza prefrontal izquierda está relativamente más activa y cuando está triste (o deprimida), su corteza prefrontal derecha está más activa.

También descubrió que la meditación aumentaba la actividad de la corteza prefrontal izquierda (reduciendo así la actividad de la corteza prefrontal derecha), por lo que, según la ciencia, la meditación te hace feliz.

Más información sobre esta investigación en su libro La vida emocional de tu cerebro (2012).

Hay otros estudios que han demostrado que esto es cierto. Por ejemplo, un estudio realizado sobre Richard Mathieu, un monje budista que ha estado practicando la meditación durante muchos años, demostró que el córtex prefrontal izquierdo de Richard era predominantemente más activo en comparación con su córtex prefrontal derecho. Posteriormente, Richard fue nombrado el hombre más feliz del mundo.

Éstas son sólo algunas de las formas conocidas en que la meditación cambia el cerebro y la corteza prefrontal, y es muy posible que esto sea sólo la punta del iceberg.

Si eres nuevo en la meditación, echa un vistazo a este artículo sobre trucos de meditación para principiantes.

Sean Robinson

Sean Robinson es un escritor apasionado y un buscador espiritual dedicado a explorar el mundo multifacético de la espiritualidad. Con un profundo interés en símbolos, mantras, citas, hierbas y rituales, Sean profundiza en el rico tapiz de la sabiduría antigua y las prácticas contemporáneas para guiar a los lectores en un viaje perspicaz de autodescubrimiento y crecimiento interior. Como un ávido investigador y practicante, Sean entreteje su conocimiento de diversas tradiciones espirituales, filosofía y psicología para ofrecer una perspectiva única que resuena con lectores de todos los ámbitos de la vida. A través de su blog, Sean no solo profundiza en el significado y la importancia de varios símbolos y rituales, sino que también brinda consejos prácticos y orientación para integrar la espiritualidad en la vida cotidiana. Con un estilo de escritura cálido y familiar, Sean tiene como objetivo inspirar a los lectores a explorar su propio camino espiritual y aprovechar el poder transformador del alma. Ya sea explorando las profundidades de los mantras antiguos, incorporando citas edificantes en las afirmaciones diarias, aprovechando las propiedades curativas de las hierbas o participando en rituales transformadores, los escritos de Sean brindan un recurso valioso para aquellos que buscan profundizar su conexión espiritual y encontrar la paz interior y la paz. cumplimiento.