"Nos deleitamos con la belleza de la mariposa, pero rara vez admitimos los cambios que ha sufrido para alcanzar esa belleza" Maya Angelou

La naturaleza nos regala muchas criaturas asombrosas en las que inspirarnos. De entre los insectos, las mariposas están consideradas unas de las más bellas. Como dice Maya Angelou, ¿alguna vez nos paramos a pensar en cómo la mariposa llega a ser tan bella?

' La oruga muy hambrienta Sabemos que las orugas pasan por un periodo de cambio en su crisálida para convertirse en mariposa, pero no solemos pensar en lo brutal que puede ser ese proceso.

Esta cita de Maya Angelo es poderosa, ya que nos incita a pensar en los cambios por los que ha pasado una mariposa para descubrir su verdadera naturaleza. Comprender estos cambios puede ayudarnos a entender la naturaleza del cambio.

He aquí cinco importantes lecciones de vida sobre el cambio que podemos aprender de esta cita:

1. El cambio es doloroso, pero puede conducir a una gran belleza

¿Es doloroso para la oruga sufrir la metamorfosis?

No podemos saberlo con certeza. Sí sabemos que las células comienzan a autodestruirse y son digeridas para convertirse en partes de la mariposa: se desgarra a sí misma para construir una nueva versión de sí misma.

No suena del todo cómodo, y quizá por eso no nos gusta pensar demasiado en ello. Pero al igual que la metamorfosis de la oruga, el cambio a menudo puede parecer duro al principio.

Un nuevo comienzo es algo bueno, pero a menudo implica el final de otra cosa, y decir adiós a personas o lugares puede ser realmente doloroso. Pero tras el dolor inicial, los cambios siempre conducen a algo hermoso.

2. Los momentos difíciles nos ayudan a convertirnos en nosotros mismos

¿Alguna vez has recordado un momento difícil de tu vida y te has preguntado cómo lo afrontaste? ¿Dónde encontraste la fuerza para continuar?

A veces, partes de nosotros mismos sólo pueden surgir realmente de los momentos difíciles. Podemos encontrar aspectos de nosotros mismos -como la fuerza de carácter, la perseverancia o la dedicación- en los momentos más desafiantes.

Estos momentos pueden convertirnos en una versión mejor de lo que éramos antes.

3. Las cosas no son siempre lo que parecen

Nadie puede ver el interior de una crisálida mientras una oruga experimenta un cambio tan sísmico. A veces, ni siquiera podemos ver realmente una situación en nuestras propias vidas hasta que hemos pasado por el otro lado.

Sólo cuando has superado el dolor puedes comprender cómo te ha cambiado para mejor.

Puede que ahora mismo no veas lo bueno de lo que te está ocurriendo, pero un día tu visión podría ser más clara y podrías ver por qué necesitabas pasar por lo que pasaste para crecer.

4. Si miras más hondo, encontrarás sabiduría oculta

Tal vez la situación de tu vida te lleve a plantearte algunas preguntas que nunca antes te habías hecho.

La vida puede ser ajetreada y ruidosa, y estamos constantemente distraídos. Puede hacer falta algo enorme para que nos detengamos y nos hagamos preguntas: ¿en qué creemos de verdad? ¿De dónde sacamos nuestra fuerza? ¿Qué queremos hacer con nuestras vidas, vamos en la dirección correcta?

Podemos encontrar sabiduría y propósito ocultos en nuestro sufrimiento, si estamos dispuestos a buscarlos.

5. Vivir es seguir cambiando y evolucionando

El cambio forma parte de la vida. De hecho, cuanto mayor te haces, más te das cuenta de que no sabes.

A veces miramos hacia atrás y no reconocemos quiénes éramos antes. ¡Es bueno! Cambiar y evolucionar es algo bueno y natural. De hecho, es una parte fundamental de estar vivo.

Como dice Angelou, rara vez tenemos en cuenta los cambios por los que pasa la mariposa, que no puede alcanzar ese nivel de belleza sin el dolor que conlleva la transformación.

Si cambiamos de mentalidad, podemos ver todo el proceso -y no sólo el producto final- como algo bello.

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